Algunos superhéroes poseen la capacidad de ver objetos invisibles para los humanos. Superman, por ejemplo, tiene visión de
rayos-X: ve a través de las paredes. En la península Ibérica exite un ave con una habilidad parecida, el
cernícalo vulgar. Es una de las pocas rapaces que ve la luz ultravioleta, una zona del espectro electromagnético que las personas no podemos percibir.
Así puede detectar los rastros de orina de sus presas y las localiza.
Pero sus superpoderes no terminan aquí. Como Superman, puede suspenderse en el aire, es decir, puede detenerse como un helicóptero. Y es de aquí de donde viene su nombre: a este vuelo se le llama “cernido”. Los pájaros parecen sujetos por algún clavo invisible. Para lograrlo, el cernícalo bate sus alas y extiende su cola a modo de vela en sentido contrario a su aleteo. Desde esta posición otea a sus posibles objetivos y desciende suavemente para pasar inadvertido.